Mil vidas… ¿Para qué quiero mil vidas si jamás se podrá ser feliz absolutamente?
¿Qué es la felicidad? ¿Qué es el amor? Son solo estímulos del cuerpo humano, nada más, ni nada menos…
Recuerdo, y recuerdo como si fuera ayer, cómo llegando a mi portal con un amigo, un día de verano normal, con un tiempo normal, y sin nada interesante que hacer… Una gran revolución iba a pasar en mi vida.
Realmente, si alguien hubiera parado el momento y me hubiera dicho, 1.000 € a que todo seguirá igualmente, yo lectores míos, hubiera apostado. Y es que, jamás sabemos que viviremos, ni la importancia de todo movimiento.
Si Platón no hubiera escrito “La República”, si Leonardo no hubiera pintado “La última cena”, si el rey hubiera atendido a las llamadas de Antonio Tejero, cualquier otra cosa hubiera pasado… Y yo, yo sin entretenerme lo justo y preciso para acabar ese día y a esa hora en la puerta de mi piso… Jamás hubiera vivido lo que he vivido estos dos años…
2010 muere una época de mi vida, iniciada en el 2008… En esa tarde que antes os relataba, dónde jamás me pensaría lo que iba a desencadenar.
Mañana/hoy se acaba todo, y creedme, lo despido de una manera agridulce; ¿hice lo correcto? Para la mayoría sí; yo no sé qué decir. En verdad sí, ahora una de las partes es feliz, avanza y todo queda atrás, cierra un ciclo, cambia su mundo.
Lógicamente esa no es esta parte que escribe; yo como siempre, para variar, me quedo encerrado en el pasado… No veo salidas… Quiero darle al acelerador y que sea lo que Dios quiera; me gustaría imitar… Pero no…
Lo único que maldigo es esa tarde… En aquél portal… Con aquella persona… Pero no maldigo a nadie… Sino… ¿Por qué? El destino jugó conmigo, o lo hizo mi corazón… No lo sabré… Total… Solo es una batalla más…
Tony.
